domingo, 17 de mayo de 2009

Esto se acaba, Charlotte

Con el punto final definitivo a Noche de Mardi Gras no se cierra sólo el proceso de creación de una novela, sino una de las experiencias más increíblemente satisfactorias de mi vida. Es más que un libro; es un sueño cumplido, una fantasía hecha realidad. Una vivencia que me ha llenado más de lo que nunca pude imaginar.

Las labores de corrección han sido arduas y frustrantes. El boli rojo echaba humo en su paso vertiginoso sobre el papel, tachando párrafos, ordenando ideas y sustituyendo expresiones. Lo he alargado al máximo, temiendo el momento en el que tendría que cerrar las tapas y guardarlo en el disco duro. Ese momento ha llegado. Creo que el resultado final es bueno. Tal vez podría haber sido mejor, tal vez podría haber quedado perfecto, pero son mis niños, al fin y al cabo, y ahí reside también parte de su encanto.


Toca seguir adelante. Lea y Sam piden paso y no estoy dispuesta a hacerles esperar más. Sin embargo, esta vez soy yo la que desconfía de mis propias posibilidades. Al igual que tuve que luchar contra las opiniones negativas que meses atrás me decían que no sería capaz de superar Faery, ahora voy a tener que pelear, y duro, conmigo misma. Sé que puedo hacerlo, sé que todo saldrá bien al final, pero nada podrá moverme por dentro como David y Charlotte lo hicieron...


4 comentarios:

espartana dijo...

¡Qué emoción pelirroja! No sabes las ganas que tengo de hincarles los dientes a tus ángeles caídos (uisss...qué carnivoro ha sonado eso)
Suerte con la próxima. Yo confío en tí y en tu talento y sé que serás capaz de superarte.
¡Que despierten los compis de Luciferrrrrrrrr!

Bego dijo...

O no ha hecho más que empezar, según se mire...

Mara dijo...

Por supuesto que puedes hacerlo y siento llevarte la contraria pero no estoy de acuerdo con que nada podrá moverte por dentro como David y Charlotte, en primer lugar porque todavía no los has creado y en segundo lugar dependerá en gran medida del momento emocional que estés atravesando cuando los crees.

Ah, y un consejo que creo que habrás aprendido ya después de la última pérdida: ¡Haz copias de seguridad!

Ángeles Ibirika dijo...

Felicidades, preciosa. Me muero de ganas de leer a ese primer Príncipe del Infierno. Sé que será bueno. Nos lo has dejado entrever (mil gracias). Pero también sé que el segundo será mejor y el tercero lo superará. Eres de esas personas especiales que crecen de continuo. Tus personajes y nosotras, tus fieles lectoras, te lo agradeceremos.